¿DOLOR MUSCULAR DESPUÉS DE ENTRENAR?

Indudablemente te ha sucedido que al hacer mucho ejercicio sientes una sensación de ardor, como si el músculo te quemara. Esa sensación se produce por un derivado del proceso metabólico, el ácido láctico, que cuando se acumula en exceso causa esas sensaciones molestas. Esa acumulación, cuando se deriva del ejercicio, es temporal y no tiene consecuencias graves. Pero si te entrenas en serio, debes conocer cómo se produce. Aquí te lo explico.

Cuando el oxígeno disminuye y el cuerpo necesita obtener más energía, para este proceso, el cuerpo  produce una sustancia llamada ácido láctico o lactato. Ese ácido láctico le permite a los músculos continuar  la actividad intensa. En ese momento, empieza a causar un ambiente ácido que es el que causa que te arda el músculo y pares de hacer ejercicio. Lo hace para protegerte, especialmente, proteger a tus músculos.

En el momento que paras, el músculo empieza a recibir oxígeno, la acidez empieza a disminuir y las fibras musculares empiezan a re-establecerse. Si no recibieran ese oxígeno se podrían dañar. Pero una vez que paras, no hay problema. El ardor para y todo vuelve a la normalidad. Puede haber una elevación transitoria del ácido láctico en la sangre pero generalmente es pequeña.

Curiosamente el dolor que se experimenta en los músculos los días posteriores al ejercicio (me refiero 24 a 72 horas después) ya no se debe a la acumulación del ácido láctico que se produjo en el periodo inmediato (eso fue lo que causó el ardor únicamente) sino al estado ácido del músculo y al proceso de eliminación de esta acidez.

Te recomendamos escuchar los mensajes de tu cuerpo.

Si te duelen tus músculos en exceso, reduce la intensidad o para el movimiento.

Haz suficiente calentamiento previo para evitar lesiones.

Mantente hidratada.

Después del ejercicio, recuerda realizar ejercicios de enfriamiento y para estirar los músculos.

Un masaje también podría ayudarte.

Aumenta la intensidad de los ejercicios gradualmente.

Sigue las indicaciones de tu instructora

Si sigues estas recomendaciones podrás ir aumentando tu resistencia progresivamente, mejorando tu condición física y tu salud al mismo tiempo.