LAS ENDORFINAS Y MI ESTADO DE ÁNIMO
Hoy por hoy todos estamos –bueno- sino todos la gran mayoría estamos OCUPADOS, tratando de encontrar el equilibrio entre la buena alimentación, es indiscutible que buscamos delicias que no engorden nuestros cuerpos.
Por otro lado buscamos nuevas formas de ejercitarnos para moldear nuestros cuerpos, quemar calorías y seguir siendo hermosas.
Ser hermosas, mantenernos hermosas o transformar un cuerpo requiere tiempo, dedicación, constancia y un plan maestro que debemos seguir si deseamos llegar a la meta. Tú sabes cuál es tu meta.
Sabes que Las endorfinas son sustancias naturales sintetizadas por el cerebro y que su principal acción es bloquear los detectores del dolor en el cerebro, esto hace que alivien o mitiguen el dolor. Pero también pueden darnos sensaciones de felicidad, tranquilidad, euforia y creatividad.
El ejercicio puede es un factor importante en la liberación de endorfinas, con lo cual sentiremos una sensación de bienestar. El ejercicio, (cualquiera que elijas), será un estimulante natural para la liberación de endorfinas.
Por otro lado es importante señalar que el tema de la alimentación se ha convertido en uno de suma importancia, como es de casi todos conocido, México se colocó en primer lugar a nivel mundial en obesidad infantil y en diabetes tipo 2, esto nos induce a pensar en el problema de ¿cómo mejorar la alimentación?, y ¿cómo fomentar el consumo de alimentos nutritivos cuando esto no se hace en la actualidad?
Lo primero que debemos tomar en cuenta es que en nuestro cerebro segrega Los neurotransmisores son biomoléculas , es decir, químicos que se transmiten de neurona a neurona para compartir información. Hay neurotransmisores específicos que causan ciertos efectos en el cuerpo como la serotonina y las endorfinas (ya habíamos hablado de ellas), y que se relacionan con los estados de felicidad y bienestar en el cuerpo.
Sabemos que el cuerpo por sí mismo es capaz de producir estas sustancias, pero la psicología y la medicina han logrado probar que hay situaciones, imágenes e incluso alimentos que pueden disparar la producción de estos químicos.
Existe una proteína llamada tripófano, que es sumamente importante en la producción de serotonina, los alimentos que lo contienen en alto grado son las legumbres, los quesos y la carne magra.
Pero comer en exceso estos alimentos no es suficiente para estar felices ya que el cerebro sólo puede absorber el tripófano cuando es combinado con carbohidratos, así que aquí tenemos la respuesta de por qué tenemos grandes deseos de helado o de un gran pastel de chocolate al estar tristes. Esto puede nivelar nuestro estado de ánimo a corto plazo, pero para conseguir esto constantemente es necesaria una dieta nivelada sistemática y balanceada que nos permita mantener buenos niveles de azúcar, carbohidratos y proteínas en el cuerpo sin subir de peso, esto para evitar picos y fluctuaciones de azúcar en el cuerpo y por ende bajones en el estado de ánimo.
Si adoptamos una dieta equilibrada, hay algunos potenciadores naturales de la felicidad que podemos permitirnos para darle a nuestro estado de ánimo un impulso extra.
Los cuatro alimentos naturales más efectivos son el chocolate, los plátanos, la piña y el pimiento.
El chocolate como lo consumimos de inicio tiene azúcares que nos dan energía, cacao que contiene carbohidratos que ayudan al cerebro a absorber el tripófano y cafeína que es un estimulante natural
El plátano es fácilmente digerible, así que no nos sentimos pesados al comerlos, nivela los ácidos en el organismo y contienen altos grados de tripófano, aunque no contienen grandes cantidades de carbohidratos.
La piña es rica en minerales y vitaminas, contiene compuestos activos que estimulan la producción de serotonina. Al mismo tiempo, otros componentes calman la ansiedad y alivian la agitación nerviosa.
El pimiento contiene capsaicina, al igual que el chile, que es en sí el picante, lo que provoca la sensación de ardor en la lengua. El cuerpo registra esto como dolor y libera endorfinas en el cuerpo para potenciar la sensación de bienestar.
Para concluir, ya sabemos que nuestro propio cerebro, los alimentos y el ejercicio nos pueden ayudar a producir las endorfinas requeridas para sentirnos bien y ellas mismas nos estimularán a desear producir más.
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Parte de algunos textos fueron tomados de los artículos de Carmen Sánchez Mora y María Emilia Beyer, Alejandro Nivón